Recursos Inhumanos (2)
Finalmente a Veramundo le hicieron caso y habrá una segunda entrevista. Bueno en realidad le han hecho caso a medias porque él había elegido a ocho candidatas y cuatro son las que tendrán esa oportunidad. No obstante entre esas cuatro pudo “colocar” a su favorita. A la que destacaba más que ninguna. O, para qué iba a engañarse, su patrocinada se parecía muchísimo a la mujer de la que Veramundo andaba enamorado. Por eso, la defensa apasionada que hizo sobre la conveniencia de volver a entrevistar a aquellas mujeres, había calado en la dirección general de la Compañía. Habría entrevista, si, pero no sería él quién la haría. Sería el subdirector general quién decidiría cuál de ellas era la elegida. Para ello haría una entrevista de unos cinco minutos con cada candidata en los que estas debían “venderse”. Fue Veramundo quién comunicó la buena nueva a las cuatro aspirantes. Día, hora, lugar y persona que las entrevistaría. A las cuatro la misma escueta letanía… Bueno a las cuatro no. A “su” candidata le dio una ventaja sobre las demás. Le explicó en qué consistiría la prueba-entrevista y le dijo más. Que fuese preparada. No vaya a ser que después de tanto desvelo por su parte el subdirector general elija a la rubia de ojos azules y grandes tetas.
6 comentarios
Para María José la gata... sobre el tejado de zinc -
La mayor, siempre la mayor... cifra ;)
María José la gata -
Ya sabes cómo soy.
Ahora dos besos o si prefieres tres te doy cuatro.
Para Abril, esperando la sorpresa -
Para María José, gata escaldada... -
besos también para ti
Abril -
¿Por casualidad entre las candidatas había alguna gorda, bajita y fea? Venga, no seas malo y dímelo que así voy haciendo mis conjeturas. ;-)
María José -
Entre esto y que en cualquier momento te miraran tu ficha médica para saber si eres candidata a tener alguna enfermedad no sé bien en que nos vamos a convertir.
Estoy segura que estos que eligen no tuvieron que pasar por estos trámites, ya me gustaría a mí verlos en competición para un puesto de trabajo y que después de tener tantos títulos y honores el puesto se lo arrebatara una bien dotada, veríamos que gusto les daba.
La persona que lo valga es la que debe de conseguirlo, me da igual que sea hombre o mujer, que sea más guap@ o menos, hay que ser más justos, todos tenemos los mismos derechos y debemos tener las mismas oportunidades.
Besos